martes, 23 de agosto de 2016

Goldies In Decks!

Podría ser el título de una película para yankees teenagers. Pero no. Es un b2b de dos sensuales mujeres djs. Una rubia. La otra morocha. Diferentes orígenes. Diferentes estaturas. Una posee más dinero que la otra en su cuenta bancaria. Pero tienen algo en común: su porte felino, emblematizado por sus looks particulares y por su estética singular, proclamando furiosamente una femeneidad bañada en erotismo. Así como se habla de aquellas alhajas bañadas en oro. Pero que no son de oro. El 24 quilates de estas dos puede observarse en numerosas fotografías artísticas que utilizan para ofrecerse al mejor postor. Perdón, al mejor promotor de fiestas: en una fotito se las puede ver juntitas, agarraditas de gran bola espejo de bolichon, destilando brillitos, enfundadas en vestidos cortos que dejan ver sus delgadas y mágicas piernas con botas bucaneras, en otra foteli se las puede ver jugando a las divas con ojos de rimmel negro de grueso grosor, una con sombrerito negro gardelero y la otra de lentes negros redondos con el signo de la paz tallado con strass.
A la rubia, que se define como dj, vj y productora (?), la mitad rubia de Goldies In Decks, casi licenciada y amante de la buena vida, le encantan los vinos caros y por supuesto es la mas vistosa. Por haber nacido con ojos claros y un cuerpo claramente entrenado, tiene varios candidatos en stock, abrazando su perrito de peluche blanco (solo que este es de verdad). Hasta llegó a postear una foto bañando el perrito, donde se dejaba ver el nacimiento de sus tetas operadas para llegar a pelotas Medium Size. Y si hablamos de pelota, a la chica le encantó agarrar la número cinco para posar con la camiseta de Argentina que apretaba a rajatabla sus senos proclamando: Vamos Argentina! Porrista en mode on.
La morocha, no tan agraciada en belleza como la rubia, pero si Licenciada recibida, se apuntó a conseguir un solo candidato. Un simpático cincuentón, owner de un sello discográfico y organizador de unas cuantas festicholas electrónicas, quien en un resurgimiento juvenil digno de un divorciado, se la llevó con el de minivacaciones a tocar en una de nuestras veintitrés provincias. Es tan fanática de “Star Wars”, que para algún Halloween raro (o quizá en algún pedido de algún cliente en particular), posó con el casco de un Darth Vader de cotillón, agitando hacia arriba su sable de luz rojo de plástico, pero sin adoptar la capa que envolvía al Real Caballero Jedi, porque esa capa tapaba su torneado físico envuelto en un apretado vestidito negro, bien cortito para mostrar sus piernas engarzadas en medias negras con estrellitas de la fantasía.
A ambas les gusta salir de shopping, pues ganan bastante dinero con el oficio mas viejo del mundo para ser gastado en primeras marcas. Si se trata de salir a correr, la rubia proclama “A entrenar por una cola feliz”, y le encanta el spa. A la morocha le encanta jugar con vinilos, puesto que ha utilizado unos cuantos en el piso para sentarse arriba bien maquillada y esbozando una sonrisa roja como si hubiera acabado de tener un orgasmo.
Ambas femmes marketineras no paran de viajar y facturar, con cientos de flyers por aquí y por allá, porque son un combo perfecto para toda ocasión al ofrecer el producto completo, un dos x uno inigualable: carne sin celulitis ni estrías y largas uñas pintadas en los equipos. Nadie sabe aun si el pecunio dinerario ganado de este dueto sexy en cada Playmate con cabina se compone de tarifa mas fee o fee mas tarifa.
Pero aún no hemos hablado de la música de Goldies In Decks!. La música? Bien, gracias. Pero lo que sí sabemos es que estas féminas no poseen la misma cualidad de las Chicas Superpoderosas, que nunca envejecen.


1 comentario:

  1. Este divertido descubrimiento se lo agradezco a mi genio amigo Chanox. Brindo x ti bombon!

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